sábado, 14 de mayo de 2011

ALEJANDRO CROTTO

William Shakespeare/ Jacques

As you like it (Act 2/ Scene 7)

El mundo entero es un teatro;
y los humanos, simplemente actores
con sus entradas y con sus salidas.
Cada hombre a lo largo de los años
hace varios papeles, y conforman
sus actos siete edades. Es primero
el bebé, que berrea y que vomita
en brazos de la nana. Luego el niño
con su radiante cara matinal:
apático, cargando su mochila,
se arrastra receloso hacia el colegio
como si fuera un caracol. Después
es el amante, que resopla como
una fragua caliente y le compone
una canción patética a las cejas
de su novia. Después es el soldado:
lleno de palabrotas y barbudo
como un oso, celoso del honor,
veloz, siempre dispuesto a pelearse,
buscando la burbuja de la fama
hasta en la boca misma del cañón.
Luego es el magistrado: la barriga
redonda y firme a fuerza de capones,
la barba recortada, severísimos
los ojos, todo lleno de sensatos
proverbios y de ideas novedosas.
Va cumpliendo su rol. La sexta edad
nos trae un arlequín enflaquecido
con ojeras y anteojos y en pantuflas;
su juvenil colgante, bien guardado,
no va con este cuerpo que se achica,
y su voz ronca de varón va haciéndose
de nuevo la de un niño, y chilla y falla
cuando trata de hablar. La última escena,
con la que acaba esta confusa historia,
es la de otra niñez y el puro olvido,
sin ojos, diente o gusto, ya sin nada.

Traducción de Alejandro Crotto
http://www.losporquesdelarosa.blogspot.com/

No hay comentarios:

Publicar un comentario

enfocá tu comentario